Noticias de Osmium
Osmio «Big Bang
La cristalización del osmio finaliza el 31.12.2026 y todo el mundo podrá adivinar lo que eso significa. Se inicia así el Big Bang del Osmio.
Esto se debió principalmente a que el Departamento del Tesoro estadounidense impuso una prohibición de importación de aluminio, cobre y níquel procedentes de Rusia. Las bolsas mundiales de metales ya no pueden aceptar estos metales.
«El Departamento del Tesoro de EEUU ha emitido una nueva norma en virtud de la OE 14068 por la que se prohíbe la importación en EEUU de aluminio, cobre y níquel originarios de la Federación Rusa producidos a partir del 13 de abril de 2024 (los «Metales»). El Departamento del Tesoro también emitió una resolución suplementaria en virtud de la Orden Ejecutiva (OE) 14071 que prohíbe la exportación, reexportación, venta o entrega de (1) garantías de los metales producidos a partir del 13 de abril de 2024 a personas situadas en la Federación Rusa una bolsa mundial de metales y (2) servicios para adquirir los metales producidos a partir del 13 de abril de 2024 como parte de la liquidación física de un contrato de derivados.
Como consecuencia de las medidas colectivas, se prohibirá a las bolsas de metales, como la Bolsa de Metales de Londres (LME) y la Bolsa Mercantil de Chicago (CME), aceptar nuevo aluminio, cobre y níquel procedentes de la producción rusa. Las bolsas de metales desempeñan un papel fundamental para facilitar el comercio mundial de metales industriales. Actuando juntos, EEUU y el Reino Unido están privando a Rusia y a sus productores de metales de una importante fuente de ingresos.»
https://home.treasury.gov/news/press-releases/jy2249
En principio, el Instituto del Osmio ya había dejado de comprar osmio en el mercado ruso cuando empezó la guerra en Ucrania. Mientras tanto, sin embargo, parece que otras fuentes están ofreciendo osmio procedente de reservas exploradas y extraídas en Rusia en las bolsas mundiales de metales sin revelar su origen.
Otras fuentes fiables que no están afectadas por las prohibiciones de importación tampoco ofrecen ya suministros suficientes. Sus ofertas oscilan entre gramos y medio kilo de osmio. Por tanto, no tiene sentido que el Instituto del Osmio compre lotes tan pequeños en todo el mundo. Esto también tiene en cuenta los propios avances de la empresa, que rondan los 300 kilos. Las previsiones anteriores de osmio recuperable también han resultado ser demasiado optimistas; las cantidades son muy inferiores a las supuestas anteriormente.
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Por esta razón, la cristalización en Suiza se interrumpirá definitivamente el 31 de diciembre de 2026, independientemente del curso de la guerra en Ucrania y de la continuación o el levantamiento de las sanciones contra Rusia. Sólo se seguirán realizando recortes más allá de esta fecha. La base de datos del osmio también se cerrará a partir del 01.01.2027, ya que no habrá más entradas nuevas para el osmio cristalizado.
El proceso de cristalización del osmio no está patentado por una buena razón. Esto permitiría imitar los procesos de producción y cristalizar el osmio. Sin embargo, habría que identificar y copiar más de 160 pasos de producción individuales. Cada uno de estos 160 pasos lleva a veces más de 3 meses. Para ello hay que saber qué hay que hacer, cómo y dónde. Pasarían al menos 40 años antes de que toda la cadena de procesos pudiera copiarse y aplicarse con éxito. Tampoco se puede acelerar el proceso de fabricación como tal. El proceso de cristalización no se transmite, ni siquiera se divulga. Esto sirve para la protección ilimitada de los inversores.
¿Cuáles son las consecuencias del fin de la cristalización el 31.12.2026? Hasta el 31.12.2026 quedan disponibles unos 300 kilogramos de osmio bruto para cristalizar. Esto corresponde a un valor de mercado de 500 millones de euros, pero el big bang que está empezando ahora supondrá sin duda muchos miles de millones de euros en el futuro. El osmio producido hasta el 31 de diciembre de 2026 se venderá después de esta fecha. Sin embargo, como ya no se producirá osmio cristalizado y las cantidades disponibles son cada vez menores, el precio seguirá subiendo inexorablemente. Poco a poco, los inversores privados e institucionales y el mercado de la joyería están viendo en el osmio un próximo «gran actor».
